¿Fumadores anónimos?

La cuestión del cigarro:

Leí sobre la ley propuesta en el senado, sobre que los fumadores en un futuro cercano, podríamos vernos restringidos en nuestra “echada de humo” por las calles de Santiago.
Yo fumo y harto. Yo decidí fumar y decidiré si es que quiero darme el trabajo de terminar con mi vicio algún día. Por esto, pienso que la ley es justa y que debería llevarse a cabo.
Conversando de esto mismo, hace un tiempo con unos amigos (todos ellos fumadores), llegué a la conclusión de que el tema es más sensible de lo que uno piensa para un fumador.
Los fumadores nos volvemos a veces insensibles, un poco egoístas, y pensamos que estamos solos en el mundo. Nos parece lógico que todos acepten nuestro tóxico humo, o a lo contrario decimos, -bueno si té molesta tanto córrete. ¿Se dan cuenta?
Bueno, también debo reconocer que no siempre se trata de egoísmo, menos mala intención. Lo que pasa es que los fumadores vivimos en nuestro propio mundo, nos bajamos del metro o la micro y lo primero que hacemos es encender el cigarro, asimismo tantas otras actividades que acompañamos con un cigarrito amigo en la mano. ¿Qué sería un rico café (especialmente si estas estresado) sin un cigarro que acompañe?, o una buena copucha con tu amiga sin fumarse unos cuantos cigarrillos. Lo que trato decir, es que para los fumadores, encender un cigarro es igual de normal como para los demás mortales es lavarse los dientes o tomar agua, es simplemente parte de uno.

En todo caso la intención de esto, no es defender al fumador, pienso que como fumadores debemos estar concientes que nosotros elegimos este vicio, pero las personas que nos rodean y que no fuman no tienen porque pagar las consecuencias por nuestra maña.
Muchos fumadores piensan que no le hacen daño a nadie (irónicamente ni a sí mismos), pero ojo, existen innumerables estudios que muestran lo dañino que es ser fumador pasivo, es más, una gran cantidad del smog que tenemos en Santiago es consecuencia del humo tóxico de los cigarros.

Vi al señor Alberto Espina (RN) criticando esta propuesta en un noticiero, no me sorprende, puesto que es conocido que los políticos reciben una gran cantidad de dinero de tabacaleras para financiar sus proyectos políticos, y como “un favor” ellos defienden o rechazan propuestas que puedan perjudicar a las empresas del tabaco.
Aun así pienso que es lógico que nosotros como los supuestos jaguares de Latino América, es decir como un país que esta en vías de desarrollo y que pretende estar a la altura de los países con más progreso, debería instaurar leyes que muchos países europeos ya tienen hace tiempo.

Es más, pienso que los fumadores no debemos entrar en pánico porque va a salir una ley que nos impida fumar en los restaurantes, cines, lugares de estudio, en el trabajo etc.
Creo que todo esto, mis amigos fumadores, es una cuestión de costumbre. Se los digo, porque donde viví antes, no se permitía fumar en muchos lugares que en Chile si, nadie reclamaba, porque es una ley y una costumbre que lleva bastante tiempo aplicándose. Entonces uno se adecuaba. Aquí creo, podría pasar lo mismo, si es que llega a salir esta ley, tarde o temprano nos vamos a acostumbrar.

Tranquilos compañeros fumadores, pensemos en nuestros prójimos, y ¿por qué no?
Fumémonos un cigarro tranquilo, en paz, sin molestar a nadie, en nuestra casita, o en el balcón. Vivamos y dejemos vivir...

(Ahhh se me olvidaba, no fumen mientras otros comen, uhhh, me da mucho asco..y a los demás también *cerrando el ojo*)
Ahora me voy a fumar...nos vemos...